CANGAS DEL NARCEA.- El Teatro Toreno acogió un alegato contra la violencia de género
Notable actuación de los miembros del Teatro de Suroccidente

El grupo teatral de Cangas del Narcea “Teatro del Suroccidente” presentaba ayer en el teatro Toreno, su última obra, un documental teatralizado en el que abordan el tema del maltrato hacia la mujer a lo largo de la historia. Con el título “La historia repetida: los dos sucesos que cambiaron la historia del maltrato en España”, Luis Miguel Gómez presenta una adaptación basada en “La Sociedad frente a la violencia machista”, de Ignacio Ruíz Rodríguez y en el testimonio de Ana Orantes.
La obra de teatro se representa con originalidad, como si del guion de un programa televisivo de investigación se tratase, mostrando los dos sucesos que cambiaron la forma de ver el maltrato hacia las mujeres a lo largo de la historia en España. El primero de ellos lleva al espectador a 1624, al momento en el que se produce “la sentencia pionera y nada usual de divorcio dictada por el Rector de la Universidad de Alcalá de Henares, Álvaro de Ayala, contra Jerónimo de Jaras y a favor de su mujer Francisca Pedraza”, explica Gómez desde la agrupación teatral. Para recrear este momento, su director siguió las investigaciones del profesor Ignacio Ruíz Rodríguez sobre la figura de Francisca de Pedraza.
El segundo suceso que se recoge en la representación se basa en las declaraciones que realizó Ana Orantes en el programa de televisión “De tarde en tarde”, de Canal Sur, en 1997, con las que puso cara a la violencia de género y que le costó la vida, puesto que 13 días después su exmarido la asesinó en la puerta de su casa, un hecho que impulsó los cambios legislativos para penalizar la violencia contra la mujer.
“Son dos sucesos separados entre sí por cerca de 400 años, pero tan similares que nadie diría que ha transcurrido tanto tiempo”,
La representación sorprendió por su originalidad y puesta en escena rompiendo un tanto las líneas tradicionales de este tipo de obras. Y así lo reconoció el público que llenó el Teatro Toreno con sus aplausos y vítores. Un triunfo más del Teatro del Suroccidente, cuyos componentes derrochan trabajo y pundonor, y me atrevería a decir profesionalidad, pese a que su media de edad no es precisamente la que representa a la juventud
