CANGAS DEL NARCEA.- Desprendimientos en Clarín. Últimas actuaciones en el juzgado

 

 desprendimiento

  Se celebró  la segunda y última jornada del juicio surgido a raíz de los desprendimientos de la calle Clarín que afectaron a un buen puñado de canguese. En la vista, que se prolongó durante toda la mañana, las partes expusieron sus conclusiones y se hizo un resumen de las pruebas aportadas la jornada anterior, consistentes en los informes presentados por los peritos de la constructora, el arquitecto, el geólogo y los peritos de la parte demandante.

En el desarrollo de todo el procedimiento se pusieron de manifiesto  discrepancias entre los demandados, reflejadas en la “disparidad de criterios”. Hasta tal punto que fueron evidentes  “ciertos enfrentamientos entre las partes demandadas sobre hasta dónde había llegado la responsabilidad de cada uno y qué era realmente de lo que se habían encargado”. Para el abogado de los vecinos  esos matices eran desconocidos para los propietarios afectados que no estuvieron en el proceso constructivo y optaron por demandar a todos los agentes intervinientes en la construcción.

También existieron desacuerdos en relación con la solución propuesta. Los propietarios han presentado su demanda apoyada en “el único documento técnico que recoge cálculos serios para acometer los problemas que tiene el talud”. Se trata del proyecto presentado por el Ayuntamiento a través de la empresa Ingiotec, que, según afirman los vecinos, es la única solución documentada que se ha dado al problema del desprendimiento.

Lidia. Arbás y otros vecinos
Lidia. Arbás y otros vecinos

Para Emilio Arbás, uno de los afectados por el desprendimiento que el 22 de enero de 2013 obligó a desalojar varias viviendas durante más de un año, la principal conclusión es que «todos están de acuerdo, en mayor o menor medida, en lo peligroso del desprendimiento y en que algo hay que hacer, aunque discrepan en la solución». También ha habido momentos para la indignación y el enfado sobre todo “al escuchar versiones que, cuando menos, son extrañas, como que se hicieron actuaciones posteriores en el talud o que el problema puede deberse a un movimiento de tierras, que nunca vimos, por parte de los propietarios de los chalés de arriba”.”Cuesta trabajo creer que porque plantaran cuatro berzas cayeran 50 toneladas de rocas, pero tocaba callar y aguantar”. Explicaba Emilio

El abogado de los denunciantes, los propietarios, aseveró que tiene clara la responsabilidad de la constructora en el caso, puesto que ha sido la que ha vendido los pisos y “quien se ha lucrado de ello, además de ser quien ha colocado las viviendas en un sitio que no tiene ninguna seguridad”.

A las puertas del juzgado, tanto los vecinos de la calle Clarín, afectados por el argayo que se produjo el pasado 22 de enero de 2013, como su abogado se mostraron satisfechos por el desarrollo del juicio. “Hemos podido practicar toda la prueba, salvo la declaración de un testigo, hemos dicho todo lo que queríamos decir y creo que hemos rebatido bastante bien las cosas que se discutían por el resto de las partes”, señaló el abogado.

 Por su parte, los vecinos, afirmaron sentirse contentos ya que “todo lo que podíamos hacer para que se intentara poner solución a este problema que arrastramos desde hace tanto tiempo ya está hecho”,.destacó Emilio Arbás, El juicio aún no ha quedado visto para sentencia, pendiente de la decisión que tome el juez sobre la necesidad de escuchar o no al geólogo, testigo de los demandantes, que no pudo asistir a las sesiones a causa de un accidente. No obstante, dada la complejidad que reviste este caso, los demandantes creen que la sentencia aún se demorará.

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R. Mera

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