CANGAS DEL NARCEA.- El concurso de cuentos de la Treito

Los chavales desbordaron imaginación adaptándo los cuentos clásicos a su mundo actual

Son ya catorce años. Y éste me pasó una cosa muy curiosa. Comencé a valorar los cerca de 200 cuentos presentados y me dio la impresión de que en alguna clase un profesor había dado la idea y todos los alumnos se habían lanzado a tumba abierta sobre ella. Todos seguían el mismo esquema, todos los cuentos tenían un desarrollo y personajes clásicos, tan solo que los alumnos cambiaban en ellos nombres y situaciones o mezclaban los personajes de unos cuentos con los de otros.

 Cambié de bloque y todo seguía igual. Lo hablé con Maribel y esta se lo comentó a Inma en la librería. Y ellas me sacaron de mi error. Las normas de esta convocatoria señalaban que los cuentos debían de estar “inspirados” en los clásicos. Al cambiar de óptica cambió todo y comencé a gozar con las narraciones. Los había geniales, de esos de impronta intuitiva o de originales mezclas de personajes, o de épocas, o de ambas a la vez. Me lo pasé en grande. Bueno, para que los concursantes no se me vengan muy arriba les diré que, en muchos casos, tuve verdaderos problemas para poder leerlos, ello hacía que se perdiera la esencia y la coordinación del relato en muchos de ellos.

Para que se hagan una idea le digo algunos títulos:

-Hansel, Gretel y el móvil

-La Caperucita andaluza

-El gato con botas de Nike

-La gamer Caperucita

-Caperucita y sus sueños digitales

-Los tres cerditos y Caperucita la Tic-toker

-Caperucita Roja y Don Quijote

-Un pinocho metálico

-Los cerditos yotuvers

-La bella influencers

-Blancanieves y lo siete pingüinos

-En un país de la Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme vivía una princesa llamada Blancanieves que había tenido siete enanos en un mismo parto

-Caperucita Azul vivió ella sola en Samartino  y acabó con los lobos con dibujos de animales que escondía trampas especiales

-El gato con playeras

-Los tres tik-tokers

-Romeo y Julieta se conocen por Internet, fueron tic-tokers, compraron un lombardini y una mansión y a su hija la llamaron Ricitos de Oro

-Los cerdito construyen sus casas con un tutorial

-Cenicienta y sus hermanastras dirimen sus diferencias en las redes con un famoso yotubers de juez

La hormiga trabajaba, la cigarra chateaba y subía fotos y vídeos, y el móvil lo utilizaba para pedir materiales a Amazón.

Juzguen ustedes mismos.

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R. Mera