SUROCCIDENTE.- Nacen muy pocos niños y en cuanto crecen emigran
Voy a darles unos cuantos datos curiosos. Escuchen: de los concejos asturianos Corvera es el más atractivo para los asturianos y Aller, el que menos. Así lo recoge el último informe del Laboratorio de Análisis Económico Regional (Regiolab), que analiza los movimientos migratorios, a fecha de enero de 2022, en los concejos de más de 10.000 habitantes. Corvera, alcanza los 15.563 habitantes con un saldo migratorio positivo de nada menos que el 286,66%. En el lado contrario de la tabla está Aller con un saldo negativo, de un 46,52%.
Curiosamente, y en contra de la creencia general, la capacidad de atracción de Oviedo es mínima: tan solo de un 2,46% frente al 56,98% de Gijón.
Por su parte, las áreas perdedoras de población son las mineras, tanto del Caudal como del Nalón o del Narcea, que presentan saldos migratorios claramente negativos. Aller supera el 46% y MIeres, el 31%. Una dinámica similar se observa en los municipios del occidente, con grandes éxodos de población en Valdés (-36,31%) y, especialmente, en Cangas de Narcea (-44%). Avilés también se queda en números negativos, un -11,21%.
A partir de estos datos, el economista Esteban Fernández extrae las probabilidades de los municipios que expulsan a la población que nacen en ellos y al revés, los que consiguen retenerla. Así, dice en el informe, “es más probable que un nacido en los municipios de Avilés o Mieres resida en otro concejo de Asturias a que siga residiendo en el suyo”. Y en el mismo caso se hallan todos los del Suroccidente
“Es más probable que un nacido en los municipios del Suroccidente resida en otro concejo de Asturias a que siga residiendo en el suyo”
Esteban Fernández asegura que hay una “tendencia centrípeta” de la población asturiana, “siendo Oviedo y, particularmente Gijón, el lugar de residencia por el que optan muchos de los nacidos en otros municipios asturianos”. Las dos ciudades han absorbido población nacida tanto en los grandes municipios de ambas alas de Asturias, como de zonas tradicionalmente industriales como Avilés o las cuencas mineras Estos movimientos contribuyen a la creciente propensión a la concentración de la población asturiana en cada vez un menor número de municipios localizados en su área central”.
Y si la situación no revierte y, de momento las políticas a ello dirigidas están fracasando, mal porvenir aguarda a las nuevas generaciones nacidas en las alas asturianas o en las cuencas
