CANGAS DEL NARCEA.- Carmen Fernández, nueva notario del concejo
“Si se cubren todos los servicios básicos, se estará siempre favoreciendo la continuidad de la población”

Carmen Fernández Pérez es la nueva notaria de Cangas de Narcea. Procede del pueblo andaluz El Viso del Alcor, a veinticinco kilómetros de Sevilla y, tras una dura trayectoria preparando la oposición, llega a suelo cangués con la ilusión de su primer destino. Tiene 33 años y comenzó a preparar la oposición a Notarías nada más terminar el grado en Derecho, a los 22 años.
Carmen cuenta que estudiaba seis días a la semana una media de diez horas al día, descansaba uno y apenas tenía vacaciones más allá de un fin de semana largo en verano y un par de días en feria. «Hoy por fin, puedo decir que soy notaria, en concreto, de Cangas del Narcea, donde todos me han acogido como una asturiana más y soy feliz por ello», añade.
Cuenta que el trato con la ciudadanía es muy cercano hacia quién requiere de nuestros servicios. Prevalece el derecho sucesorio, y en lo inmobiliario de las fincas rústicas a las urbanas. En la industria predominan las pequeñas empresas, las asociaciones… y no se toca en el despacho tanto derecho mercantil como en las grandes ciudades.
Mi día a día dependen de los problemas que van llegando. En mi caso, llego a la oficina, compruebo la agenda del día y empiezo a repasar las escrituras que tenga para ese día antes de que lleguen los interesados, retoco lo que tenga que retocar, compruebo la documentación e imprimimos las matrices y demás documentos. Labor que aparentemente parece sencilla pero que para nada lo es pues siempre surgen dudas, y más ahora en el inicio.
Se la nota contranota: “Para mí estar aquí implica más calidad de vida, por el entorno y porque son menos horas de trabajo que en una notaría de ciudad. Aunque económicamente no sea igual, para mí es más importante que después de tantos años de oposición pueda tener tiempo libre para disfrutar de la vida cuenta en una entrevista concedida a La Nueva España.
Las necesidades no son las mismas en la ciudad que en la zona rural, la documentación es distinta porque las necesidades son distintas, pero igualmente las personas necesitan al notario en las zonas rurales. La profesión de notario consiste en informar y asesorar al ciudadano y dar fe, conforme a las leyes, de los contratos y demás actos extrajudiciales, por lo que allí donde haya personas, siempre será necesario un notario”.
Considera que “cuanto más estable sea un núcleo de población, más garantizará la plaza del notario. Al final, las plazas las crea la ley según las necesidades de cada zona, por lo que si hay un núcleo de población sea donde sea, más o menos estable, siempre habrá una plaza, por ello la Administración para garantizar la plaza de notario debe promover que la población continúe. Creo que es importante la inversión en telecomunicaciones, el transporte, la sanidad, la educación. Si se cubren todos los servicios básicos, se estará siempre favoreciendo la continuidad de la población y, por ende, la plaza de notario”.