SUROCCIDENTE.- Nace un dinámico Club de Montaña: La Penona
Aglutina a alpinistas, escaladores, barranquistas, espeleólogos, corredores, senderistas, y ciclistas

El Suroccidente cangués cuenta desde no hace muchas fechas con un nuevo club deportivo dedicado a la montaña. Comenzó con una docena de integrantes en febrero y unos meses después ya son una treintena de componentes, todos ellos amantes de los deportes de aventura como alpinistas, escaladores, barranquistas, espeleólogos, corredores, senderistas, ciclistas. Sus componentes están vinculados a los distintos concejos del Suroccidente no solo al de Cangas del Narcea.
Además de agrupar a personas con intereses comunes y generar un espacio donde poder desarrollar las actividades de forma conjunta, este nuevo club se marca el propósito de promover el respeto por el entorno natural. Reconocen que, aunque Cangas del Narcea no es un referente para la práctica de escalada sí que tiene varias zonas “muy bien aprovechadas, cuidadas y conservadas”. Para conseguir eso explican que, desde hace años, quienes practican estos deportes de montaña han trabajado para mantener accesibles estos lugares, una labor en la que incidirá el club. De esta relación nace el nombre del grupo: La Penona, en referencia a uno de los montes referencia del concejo.
“La conservación del entorno es lo que buscamos principalmente y transmitir una práctica responsable, porque lo que tenemos aquí es un privilegio”, destaca Aitor Ansola, el presidente del club y que forma parte de la Escuela de Escalada de Rengos, que ya lleva años abriendo vías de escalada por la zona. “Hubo gente en Cangas que dejó allí su trabajo, que luego fuimos continuando; comenzaron con un par de vías de escalada y ahora ya hay 54 y sigue creciendo, con dificultades para todos los niveles, al final formar parte del club es una manera de colaborar en el mantenimiento de la zona y su equipamiento, en el caso de la escalada”.
Fernando Rodríguez Marqués es el tesorero y cuenta que empezó hace cinco años a practicar escalada y que se iba una vez al año a Quirós para contratar una actividad, que en Cangas no tenía oportunidad de realizar. Es profesor en el instituto y allí coincidió con compañeros con los mismos intereses, un círculo que se fue ampliando también fuera del Instituto hasta llegar el momento de plantearse el nacimiento del club por “la necesidad de unir afición”.
Y con esa idea de unión, el club “está abierto a seguir recibiendo gente interesada en los deportes de montaña y animan a que se sumen a las actividades que promueven, para lo que cuentan con guías profesionales, para que las salidas se desarrollen con total seguridad. Porque en algo en lo que insisten es en que no hay que tener una experiencia previa en estos deportes para formar parte del club, ni una condición física específica. De hecho, cuentan como unos aprenden de otros, en una formación continua.