TINEO decreta luto oficial por la muerte de Xuan Bello

Tineo, concejo natal de Xuan Bello, ha recibido con estupor en la tarde de ayer, al igual que la sociedad asturiana y el mundo de la cultura, la noticia de la muerte de una de las voces más reconocidas de las letras asturianas. “Ha fallecido un tinetense (del pueblo de Paniceres) que ha llevado el nombre de Tineo por todo el mundo, nos sentimos consternados y afligidos por una noticia además tan inesperada”, declara Montse Fernández, alcaldesa tinetense. El consistorio ha declarado luto oficial en el municipio. La Alcaldesa también quiso transmitir su más sentido pésame a familiares, amigos, allegados y a todo el pueblo tinetense. También ha querido destacar «la calidad y cantidad» de la obra de Xuan Bello, enormemente reconocida a nivel regional y nacional: “Ensayos, poesías y relatos. Lo que Xuan Bello elaboró en sus 60 años de vida es de una magnitud espectacular. Se nos va el escritor más importante que Tineo ha tenido».
Su propia esquela, escrita en asturiano, recoge una cita de su “Hestoria Universal de Paniceiros”: “Conozco un país onde’l mundu llamase Zarréu Grandiella, Picu La Mouta…Paniceiros”.
M.F Antuña ha escriyo de el en el diario El Comercio: «Xuan Bello,nombre imprescindible de la narrativa y la poesía asturiana, uno de los escritores más destacados de la literatura contemporánea tanto en asturiano como en castellano, ha muerto este martes en Oviedo a causa de un aneurisma. Tenía 60 años cumplidos el 10 de julio y una mente privilegiada capaz de emocionar, de jugar con la memoria y el olvido usando palabras mágicas, certeras, que siempre conducían al pasado, a la infancia, a los orígenes, a la nostalgia y al paso inexorable del tiempo. Tenía una pluma hermosa que compartía desde hacía décadas con los lectores de este periódico cada domingo. Tenía el don de la ficción y la poesía; tenía un compromiso firme con la llingua asturiana, por cuya oficialidad batalló la vida entera; tenía una mujer, una hija y un sinfín de amigos y lectores que ya le añoran y le lloran, aún en estado de shock, aún incapaces de digerir lo acontecido…»