SUROCCIDENTE.- Ha llegado la década del campo asturiano

«La década del cambio es la década del campo». Así de contundente se mostró al respecto el consejero de Medio Rural, Marcelino Marcos Líndez quien quiso dejar claro que Asturias entra en un momento decisivo para el futuro de su sector agrogadadero, su costa y sus comunidades rurales.
Estas palabras fueron pronunciadas en el acto de constitución de la mesa de trabajo para el Pacto del Medio Rural, un proyecto que el Consejero definió como un «compromiso firme del Principado» y que busca convertirse en un documento de referencia a largo plazo.
Para Marcos, este pacto nace con un propósito ambicioso: diseñar una herramienta estable de concertación social y política que permita definir, de manera consensuada, una estrategia común para afrontar los retos más urgentes del medio rural asturiano. «Queremos una hoja de ruta que sirva para mirar hacia el futuro con seguridad y que se mantenga más allá de los cambios políticos», subrayó Marcos Líndez.
Para alcanzar este objetivo, la Administración apuesta por la colaboración público-privada. Por ello, la mesa de diálogo estará formada por un amplio abanico de representantes: la Federación Asturiana de Concejos, la Delegación del Gobierno en Asturias, la Red Asturiana de Desarrollo Rural, la Universidad de Oviedo, Cooperativas Agroalimentarias, la Federación Asturiana de Empresarios, las organizaciones agrarias URA, UCA, Usaga y COAG, así como el propio Gobierno regional. Este diseño busca garantizar que todas las voces —institucionales, académicas, empresariales y agrarias— puedan participar en la construcción de un acuerdo sólido.
«No se trata de fijar soluciones inamovibles, sino de establecer líneas de trabajo flexibles…”
La idea es dar forma a un documento que se estructurará en cinco pilares fundamentales: la ganadería, la agricultura, la agroindustria y el desarrollo rural, la pesca marítima, y la gestión foral y la planificación agraria. «No se trata de fijar soluciones inamovibles, sino de establecer líneas de trabajo flexibles, que puedan adaptarse, mejorarse y evaluarse con el tiempo», explicó el consejero. El horizonte temporal es igualmente claro: la intención es poner en marcha la hoja de ruta definida antes del año 2030.
Marcos Líndez insistió en que el éxito del pacto dependerá de la capacidad para alcanzar consensos reales. «El acuerdo será fruto del equilibrio entre las distintas organizaciones, priorizando los puntos de unión y evitando que las diferencias desemboquen en enfrentamientos», apuntó.
«El acuerdo será fruto del equilibrio entre las distintas organizaciones, priorizando los puntos de unión y evitando los enfrentamientos»
En este contexto, ASAJA y COAG. consideran imprescindibles la necesidad de elaborar una Política Agraria Común (PAC) adaptada a las particularidades del territorio, diseñar un plan estratégico propio, garantizar precios justos que cubran los costes de producción y reconozcan la calidad de los productos asturianos, y abordar de forma urgente el «grave problema» del relevo generacional que amenaza la continuidad de muchas