CANGAS DEL NARCEA. De estómagos, ideas, mesoneros y plumillas

 

 20140314_010902_4

 Tres mosqueteros de las letras y un D´Artañán de la palabra topan, no con la iglesia, sino con el mesón por excelencia de la villa.

-¡Teneos amigos!, justo es dar gusto al intelecto, pero aquí yo estoy más presto y digo: demos ahora gusto al cuerpo

-Razón tenéis compañero. Entremos y saludemos con gran gusto al mesonero que fama y firma proclama de esta villa y su concejo.

-¡Mosqueteros de las letras, paladín de la palabra!, entremos, gocemos y después…ya veremos

No más pasada la puerta sale presto el mesonero saludando a los plumillas y al del micro de aire suelto.

-Sean bienvenidos  vuesas mercedes que aquí encontrareis viandas que pocas veces veredes; si acaso a vuestros oídos algunos romances lleguen de las bondades de platos, cacerolas y sartenes que nuestra cocina llena de viandas especiales que no más  puestas  en mesa curarán todos sus males.

-Y bien decís posadero, romances y coplillas ya corren por los concejos y hasta romances de ciego cuentan por esos lares de las calidades del yantar en esta casa y sus  manjares.

-Me abrumáis con vuestras loas, más yo soy el obligado de cumplir, y así lo hago, con aquellos que aquí y allá han proclamado todo lo que esta casa ha logrado. Y a mi me consta, y así ha pasado, que vuesas mercedes han sido en parte culpables de esas coplas y romances. Siéntense  pues y acomoden que yo dispondré al instante cuantas viandas asienten a sus sabios paladares.

-Bien decís señor ventero y si la audiencia lo requiriera, o el momento propicio fuera, yo aquí pregonaría la excelencias desta ilustre cocina y mesón tan afamado como el Blanco conocido en ciudades, concejos y condados.

Siéntanse pues los plumillas y el del verbo fácil y entonado y acuerdan dejar que José Ron decida platos, orden y cuidados.

-Y digo yo compañeros que de trago largo entremos y unas cervezas echemos para acomodar estómagos a lo que llegare luego para que no encuentren alterados jugos y otros caldos raros que en el estómago habitan como en política listillos para llenarlos.

-Aceptamos la propuesta y ahora mismo comenzamos y dejemos la polémica, andróminas y monsergas, para cuando todo esté acabado y agradecido el estómago nos ilumine la mente y todo lo veamos claro.

Como corren tiempos nuevos y todo está transformado, un chupito de potaje llega al mantel preparado.

Que diría mi abuela, hermano, si un potaje en un vaso le dieran condimentado!.

  Pan tumaca con jamón; foe al Pedro Ximénez con mermelada de piesco, de aquí, de al lado, de la ribera de Corias, de monasterio afamado. Un crujiente de butiecho como antaño preparado llena la boca de esencias y de sabores amargos y la mente de recuerdos de otros tiempos ya pasados invitando a recordar personajes afamados que a lo largo de los años por este mesón pasaron. Un arroz con pulpo y algas nos conmueve el corazón y cada grano se agranda hasta llenar la garganta de sensaciones extrañas. El mundo ante ti se agranda, todo es bueno, nada malo pasa.

  -Decid bien y usar palabras sabéis, más yo digo que más pluge que relates lo que a cada plato atañe y a cada vianda apaña con caldos de aquí, de Cangas.

-Pues un Castro de Limés, de las Bodegas Obanca, no está mal para abrir boca y dejar volar la mente por viñedos y montañas. Y al cambiar de plato habremos de probar un Barzaniellas, de Bodegas Monasterio, con remembranzas de salmos y claustros de monasterios. Y para preparar gargantas para el himno con que la cena cerremos, probemos un “Al pie de cien montañas” que de ViDas nos dé arte para que luego entonemos.

-Es perfecto compañero, pero te olvidas los quesos cuyas glorias loar debemos y que Pepín nos regó con un mejunje muy nuevo; un vino dulce extraído de la sidra, congelada primero, que un alquimista arregló para en delicia envolverlos.

-Bien habláis, y agregar quiero que luego llegó Enrique que sustituyó los vinos por unos inventos nuevos que dejaron nuestras mentes lúcidas en extremo. Gin Tonic lo llaman los que en estos son expertos y un arte especial, en el que Quique es experto, se requiere para hacerlos.

 20140314_001355

Mas entre nosotros hay un extraño mosquetero que ha viajado por el mundo y cosas nuevas conoce un tanto raras y extrañas, y fijaos si es raro ello que más que el fútbol de España en el americano es experto, así como en  trovadores muy raros, muy raros ellos, de nombres tan complicados como el Old-Fashioned que a Quique pidió sin tan siquiera pensarlo..

Y aquí acaba esta historia que hoy les he relatado y que no solo yo firmo si no los cuatro agraciados. La noche fue larga, agradable y de amistad poblada y ahora, ya de mañana, con una sonrisa larga, solo me queda decirles:

 Caramba, caramba, caramba

Los dos veteranos
Los dos veteranos

 

 De “La máquina de la una” de Onda Cero del 17-03-2014

 

 

.Comparte en tus redes sociales
Share on Facebook
Facebook
Tweet about this on Twitter
Twitter
Share on LinkedIn
Linkedin
Pin on Pinterest
Pinterest
Share on Tumblr
Tumblr

R. Mera

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.